PAGINAS

25 julio 2012

EL ENOJO Y SUS EFECTOS SOBRE LA SALUD

Alguna vez te has tomado tiempo para pensar cómo afecta el enojo en nuestra salud? Yo no,  es cierto que leo mucho acerca del estrés o depresión, pero el enojo en sí, no. A todos los que estamos inmersos en este caos de la crisis, y nos afecta a menudo, la impotencia de no poder cambiar cosas, o estar todo el tiempo en tensión , les paso este artículo de la página ALIMENTACIÒN SANA,  que me pareció muy bueno y sé que a ustedes, también les resultará interesante, saber como influye en nuestro cuerpo y salud el contener o estar todo el tiempo de mal humor, enojado y nos da pautas para hacer un

cambio al respecto.. espero que lo disfruten, y también dense una vuelta por la página que es muy completa..
.Aquí les paso una introducción:


“Aún después de una semana, no hay signos de ninguna reducción en el efecto”, dicen los investigadores de las universidades de California y Columbia en una publicaron del International Journal of Psychophysiology.
Nos preocupamos de la obesidad, del colesterol, de mantener una dieta equilibrada… Pero sobre el enojo, oirás poco y nada. A pesar de que crece hasta alcanzar dimensiones delirantes en nuestra sociedad, daría la impresión de que a fuerza de ser una reacción cada vez más habitual ante la más mínima contrariedad, lo hemos “incorporado” y ya nos parece normal.
Pues no lo es, y enojarse tiene efectos definitivos sobre la salud, que van más allá de lo que pensamos.
Estudios recientes demuestran que la presión sanguínea se eleva (con todo lo que conlleva) durante el ataque de enojo y las alteraciones orgánicas siguen reproduciéndose idénticas una semana después, cuando recordamos el suceso original. “Aún después de una semana, no hay signos de ninguna reducción en el efecto”, dicen los investigadores de las universidades de California y Columbia que publicaron su descubrimiento en el International Journal of Psychophysiology a primeros de este mes.
El enojo está asociado a un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas y otros problemas de salud y el estudio sugiere que el estrechamiento de las arterias también podría producirse a mayor velocidad en personas que puntúan alto en tests que miden el enojo y la hostilidad.

Las emociones y el cuerpo
El cuerpo es como una esponja: además de absorber los nutrientes y energía de los alimentos, también es muy susceptible a almacenar la forma en como sentimos la vida. El enojo es una emoción de resistencia, de control. Se puede manifestar de muchas formas: cuando somos intolerantes, desesperados, tenemos sentimientos de violencia o de venganza.
Para no ir más lejos, biológicamente podemos sentir los efectos evidentes de la emoción en nuestro cuerpo si nos observamos.

Efectos del enojo en el cuerpo

Cuando estamos muy enfadados:
  • Todo el cuerpo se tensa.
  • La sangre circula más lento
  • Los músculos y articulaciones se engarrotan.
  • Se altera y rompe su equilibrio el sistema cardiovascular, hormonal y nervioso.
  • La presión arterial se desequilibra y hay un aumento descontrolado en la frecuencia cardíaca y en la testosterona.
  • Se altera la actividad cerebral, especialmente los lóbulos frontal y temporal, de una forma negativa.
  • La bilis se derrama dentro del cuerpo, la sangre se envía a la periferia dejando a órganos importantes sin sangre.
Si nos imaginamos que todos estos efectos suceden una, dos, tres o hasta más veces al día, si nos imaginamos que estos efectos están en nuestro cuerpo una semana, dos meses, 10 años, 40 años… ¿Cómo podría sentirse el cuerpo después de estar sufriendo este desgaste severo interior? Y a esto no se le ha agregado los síntomas que producen el miedo o la tensión, por ejemplo, que aunque son muy similares a los efectos del enojo, son muchas veces más acentuados.